Juego de Tronos: Botines de guerra

Según internet, este episodio, el cuarto de esta séptima y corta temporada, ha sido el mejor hasta la fecha. Y si lo dice internet, tiene que ser cierto.

No voy a discrepar en que el desenlace del episodio, pese a sus flagrantes melonadas, es una pasada digna de una superproducción cinematográfica, y no hay nada en un dragón churruscando gente que pueda disgustarme. Pero, por otro lado, ya llevo un tiempo notando que las grandes revelaciones de la serie, los giros del guión, están tan telegrafiados que cualquiera con un conocimiento mínimo de narrativa y que no se quede frito viendo la tele puede olerse a la legua lo que va a pasar. Este es un problema del que somos conscientes desde la temporada anterior y que, a medida que la historia se aproxima hacia su desenlace, se hace cada vez más evidente. Y no hay solución, así que toca aguantarse y disfrutar sin frustrarse por la falta de sorpresas.

Siempre nos quedará Casa Austera.

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En Desembarco del Rey

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Habiendo recibido noticia del oro saqueado en Altojardín, Tycho Nestoris felicita a Cersei por la rapidez con la que atiende sus deudas, aunque, dada la naturaleza vampírica de su profesión, lamenta no poder chuparle la sangre más tiempo con los intereses.

"Vuestro padre era eficiente, pero vos sois la Speedy Gonzales del mundo de la morosidad", le dice. "Estoy tan contento que cantaría sobre la importancia del sistema bancario, pero Disney podría demandarnos, sobre todo ahora que están rodando la tardía secuela de Mary Poppins".

-Cuando era pequeña, quería ser princesa Disney. Pero supongo que el papel de reina malvada me queda como un guante.

La reina le comenta que tiene intención de aumentar sus tropas (a diferencia de HBO, ella no puede utilizar un ordenador para copiar y pegar a cuatro matados hasta que parezcan diez mil) y que Qyburn ha contactado ya con la Compañía Dorada, que son la crème de la crème de los mercenarios de Essos, aunque sus tarifas no son nada competitivas.

Viendo que estos planes tienen visos de prosperar si se respaldan de forma apropiada, Tycho le asegura que puede contar con la ayuda del Banco de Hierro... siempre y cuando, claro está, el oro de los Tyrell llegue a tiempo a su destino, porque los bancos no son hermanitas de la caridad, y, aunque lo fueran, ¿desde cuándo financian las monjas una guerra? ¡Eso no tiene sentido!

Como sabemos leer entre líneas, vamos a suponer que el oro tiene tantas posibilidades de llegar a su destino como Daenerys de dejar de comportarse como una niñata consentida.

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En Invernalia

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Meñique se presenta en los aposentos de Bran para regalarle el puñal con el que intentaron asesinarle en la primera temporada.

"La verdad, no sé por qué os estoy regalando esta arma", dice Meñique. "Pero el otro puñal, el que le quitó la vida a vuestra madre, estaba fuera de stock... Tampoco sé por qué os acabo de decir eso. Se me dan fatal los críos".

"¿Sabéis a quién pertenecía?", pregunta Bran, capcioso.

"S-no. Pero esa misma pregunta desencadenó la Guerra de los Cinco Reyes™".

"Sí, sí, sí, 'el caos es una escalera' y todo eso", le interrumpe Bran. "Ya lo he oído antes. ¿Temporada tres tal vez? Verlo todo puede ser muy confuso. Pero que conste que sé lo que hiciste el último verano".

Meñique se hace el sueco.

Si yo estrenase silla de ruedas, estaría más feliz que Bran. Esperad... No.

La siguiente persona en visitar a Bran es Meera Reed, que le dice que se da el piro, porque aunque preferiría quedarse con él y disfrutar de sus aburridos trances místicos, su deber ahora es estar al lado de su familia.

"Okey", le contesta Bran inexpresivo.

"¿Eso es todo? A ver, caraespátula, que te he protegido de aquí hasta el quinto c*** y de vuelta hasta tu casa, cargando con tu pesado culo de lisiado la mitad del camino mientras nos perseguían cientos de zombis y caminantes blancos. ¡A mi hermano lo acuchilló un esqueleto, y Verano y Hodor murieron descuartizados a manos de unos espectros! ¡Todo por ti! Incluso cuando nos creíamos ya a salvo junto al Muro, tuve que soportar un pésimo chiste de toc-toc, que ha sido con diferencia lo más traumático de toda esta experiencia".

"Okey", dice Bran igual de inexpresivo. "¿Gracias?".

Meera se da cuenta de que el Bran que ella conocía murió en aquella cueva mal ventilada con un viejo colgando del techo y se larga dando un portazo... en su corazón.

-¿Preferís una reacción más melodramática?

-Sí, por favor.

-You're tearing me apart, Meera!

Arya Stark llega a Invernalia y pide que la conduzcan hasta su hermana, pero los guardias apostados a las puertas son novatos y no la reconocen, así que le impiden el paso. Ella se cuela de todos modos con una tirada de sigilo y aprovecha para visitar la cripta familiar, donde Sansa la encuentra contemplando la estatua de Ned Stark.

"No se parece mucho, ¿no?", comenta Arya. "No recuerdo que padre tuviera la espalda y los hombros de He-Man de Grayskull".

A pesar de que las hermanas llevan seis años separadas, no saltan chispas del amor fraternal cuando se ven. Aun así, acaban abrazándose. Qué *bostezo* emotivo.

Arya, por curiosidad, le pregunta si mató a Joffrey, y Sansa le responde que ojalá.

"Joffrey estaba en mi lista de personas a las que voy a matar", dice Arya.

"¿Una lista de personas a las que vas a matar? LOL".

Sansa se lo toma a guasa y Arya le sigue la corriente, decidiendo ocultar a su hermana, al menos de momento, que ahora es una asesina freelance.

Desde luego, hay cosas que es mejor callarse, sobre todo cuando cierta perlirroja envidiosa podría tomarse a mal que de repente haya tanta persona especialita en su familia. Jon regresó de entre los muertos y podría ser el "príncipe que fue prometido", Bran se ha convertido en el Cuervo de Tres Ojos, Arya es una mujer sin rostro con dotes asesinas casi sobrenaturales... ¿Y Sansa? A Sansa le gustan los pasteles de limón y está sustituyendo a Jon mientras este pasa el fin de semana en Rocadragón.

-Al menos sigo siendo la hermana más alta.

Sansa le dice que Bran también está en casa, y Arya se alegra de oírlo hasta que visita a su hermano en el Bosque de Dioses y ve la cara de cartón que tiene, como si se hubiera leído demasiados libros de mindfulness.

"Ve visiones", explica Sansa. "A veces lo demuestra con absoluta falta de delicadeza y tacto, así que espero que no hayas hecho nada que no quisieras que supiera, como, ¿qué sé yo?, haberte convertido en una asesina ninja con poderes místicos".

"¿Quieres un puñal?", pregunta Bran a Arya. "Toma".

Y sin más ceremonia le entrega el puñal que le acababa de regalar Meñique. Total, él solo lo iba a utilizar para rascarse la rabadilla y seguro que la chica le da un uso más adecuado a su propósito. ¿Será este el principio del fin para Meñique?

Creo que no hace falta ser el Cuervo de Tres Ojos para intuir cuál puede ser el destino del confabulador más retorcido de los Siete Reinos. Imagino que se sorprenderá al ver quién tiene ahora el puñal, al distraerse meterá el pie en un charco helado, y morirá quince días después a causa de complicaciones del constipado.

It's dangerous to go alone! Take this.

Arya encuentra a Brienne de Tarth entrenando a Pod en el patio (i. e., desviando sus torpes espadazos y poniéndole la zancadilla una vez tras otra sin que el chico aprenda nada de provecho), y le pide que también la entrene a ella. La moza dice que buscará al maestro de armas para no herir susceptibilidades masculinas, pero la chica Stark insiste en que quiere que la entrene la persona que hizo quedar al Perro como el coyote de los dibujos animados.

Cruzando sus espadas, las guerreras más duchas de todo Poniente desatan toda su fuerza y habilidad para demostrar lo que valen horas y horas de clases de esgrima detrás de las cámaras. El combate acaba en tablas, a satisfacción de ambas.

"¿Quién os ha enseñado eso?", pregunta Brienne.

"Nadie", responde Arya, haciéndose la misteriosa. "Bueno, a veces se hace llamar Jaqen H'ghar. Tiene el pelo largo y castaño, cortado a la altura de los hombros, con un mechón blanco cayéndole sobre la frente. Suele vestir túnicas andrajosas, aunque a veces cambia incluso de rostro, y tiene la molesta manía de hablar en tercera persona de sí mismo. Podéis encontrarlo en la Casa de Negro y Blanco, el templo del Dios de Muchos Rostros, en Braavos. Está en una pequeña isla en la laguna a la que se puede llegar a ella tanto en bote, como por puente. Puedo dibujaros un mapa si queréis".

Fenomenal, y ahora haced lo mismo sin espadas de pega.

A Sansa, que ha presenciado el entrenamiento, no parece hacerle gracia que su hermanita le haya ocultado que ahora es la hija que el Zorro y Connor MacLeod nunca tuvieron. A Meñique no le pasa desapercibido su mosqueo y toma nota mental para aprovecharse de esta circunstancia en el futuro.

¿Qué nueva iniquidad tramará Sibilino MacPérfido ahora? Lo veremos en próximos episodios...

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En Rocadragón

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Daenerys Targaryen baja a la playa acompañada de Missandei, que le cuenta por el camino que por fin se lió con Gusano Gris y él le hizo de "todo", confirmando que perder el pajarito aviva la imaginación y eleva el nivel de habilidad sexual a cotas insospechadas.

Jon Nieve y Davos Seaworth las esperan en la playa, y Jon invita a la Reina Dragón a acompañarle al interior de la mina de vidriagón, donde le muestra unas pinturas muy antiguas que representan la alianza de los hijos del bosque y los primeros hombres contra los caminantes blancos.

Me pregunto si también pintaban penes anatómicamente incorrectos en las paredes.

"¿Sabéis lo que esto significa?", pregunta Jon.

"¿Que los hijos del bosque no tenían papel para dibujar?", responde Dany.

"Que debemos luchar juntos si queremos sobrevivir".

"Os ayudaré... si hincáis la rodilla".

"No".

"¡Hincad la rodilla!".

"¡He dicho que no!".

"¡Hincadla, so cabezota!".

"¡Y un jamón, marimandona!".

Al salir de la cueva, Tyrion y Varys se reúnen con ellos y el grupo aprovecha para tomarse una foto para la carátula de su nuevo disco.

Por BlondieTVJunkie.

Tras la sesión fotográfica, los dos consejeros informan a la reina de que los Inmaculados han tomado Roca Casterly, pero Altojardín ha caído. Además, los Lannister se están llevando todo el oro de los Tyrell a Desembarco del Rey, lo que les permitirá seguir reclutando hombres y pertrechando a su ejército. De hecho, tendrán tanto oro que no necesitarán patrocinios. No más banderas con leones dorados rampantes acompañados de mascotas corporativas como el payaso de McDonald's o el tigre de Frosties de Kellogg's.

Dany echa una buena bronca a Tyrion por hacer planes birriosos, poniendo en duda que quiera derrotar a sus hermanos, y luego, dándole otra vez por la vena pirómana, propone subirse a sus dragones y reducir la Fortaleza Roja a cenizas.

Jon le dice que la gente cree en ella porque tienen fe en que construya un mundo mejor, y duda que este mundo mejor incluya hogares incendiados, miles de inocentes calcinados y tres o cuatro supervivientes en la unidad de quemados intensivos contando los horrores de su "hazaña".

Dany mira al cielo, pensativa.

-Me apetece un perrito caliente.

Poco después, Davos le dice a Jon que le ha pillado lanzando miraditas a la Reina Dragón.

"¿Cómo se  os ocurre?", le regaña Davos.

"Yo ni siquiera me había fijado", protesta Jon. "¡Vos, que me disteis un codazo!".

"Pero después de un codazo, uno mira de reojo, hombre", explica Davos. "Mirar un escote es cómo estar observando al sol. No lo haces fijamente, es muy arriesgado. Miras de pasada y luego disimulas".

A ver qué cara pone Jon cuando se entere de que Dany es su tía.

Los dos hombres se cruzan con Missandei, que pregunta a Jon por qué se apellida Nieve si su padre se apellidaba Stark. Resulta que en la isla de la que ella viene no hay bastardos, ya que ni siquiera existe el concepto de matrimonio. En Nath se estila el amor libre. Todos quedan en pasar allí un fin de semana cuando acabe la guerra. Luego la intérprete les explica que ella sirve a Daenerys porque así lo ha escogido.

"¿Y qué sucedería si quisierais volver a casa?", le pregunta Jon.

"Mi reina me ayudaría a hacer la maleta y correría tras el tren por el andén despidiéndose de mí. Os lo traduzco: Daenerys es buena chica. ¡Enamoraos!".

Este es el problema que tiene reducir el número de episodios por temporada, que no hay tiempo para desarrollar estas relaciones con naturalidad, sino que hay que embutírselas al espectador en la boca y empujarlas esófago abajo con un palo.

-Estamos pensando en que el primer revolcón os lo deis al final de esta temporada. ¿Os va bien?

El barco de los Greyjoy que sobrevivió al ataque de Euron llega a la costa, y Jon se reencuentra con Theon, al que no mete dos guantadas porque salvó a Sansa de su cautiverio, que si no...

Theon, falto de testosterona, les dice que Yara está prisionera en la Fortaleza Roja y que necesita la ayuda de la Reina Dragón para rescatarla.

Jon le responde que Daenerys no está ahora en Rocadragón, pero puede dejarle un mensaje tras la señal. Piiii...

-Jolín, cómo te pasas, Jon.

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En el Dominio

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Y llegamos a la gran escena del episodio, en la que miles de jinetes dothrakis liderados por su khaleesi a lomos de Drogon atacan la caravana que conduce el oro de los Tyrell hasta Desembarco del Rey y masacran a cientos de soldados mientras Jaime Lannister contempla la escena alelado.

Supongo que no hay mucho que el Matarreyes pueda hacer contra un dragón gigante escupefuego acompañado de una hueste de salvajes armados con hoces afiladas, por muy capitán de la guardia real que sea. Si yo fuera a él, echarme a llorar detrás de una roca estaría entre mis primeras opciones. No obstante, lo más inteligente habría sido hacer caso a Bronn, al que todavía debe un castillo (uno que no sea una maqueta) y huir con el rabo entre las piernas.

Pero esta no es una serie de gente inteligente, así que...

[Clamor ensordecedor en el que se mezclan gritos de batalla y bramidos de dragón.]

-Estamos fritos.

♪ I look at you and my blood boils hot
I feel my temperature rise ♪

♪ I want it all, give me what you got
There's hunger in your eyes ♪

♪ I'm getting closer, baby hear me breathe ♪

Cuando por fin sale de su estupor, Jaime ordena a Bronn que utilice la ballesta extragrande de Qyburn para derribar al dragón.

Teniendo en cuenta que girar el armatoste para apuntar con él es un suplicio y que se tarda aproximadamente cuatro años en recargarlo, no debería ser muy complicado esquivar sus proyectiles, sobre todo cuando eres un dragón y el cielo entero es tu patio de recreo; pero Daenerys decide cargar contra el aparato de frente, porque es idiota.

Para suplicio de los fans, que contienen el aliento a la espera de ver cuál de sus personajes favoritos palma antes, el arpón se clava en el hombro de Drogon.

-¡Sonríe, hijo de pu...!

-No puedo sonreír más.

Por suerte, aquí no muere nadie. Nadie importante, quiero decir. Hay muchos soldados abrasados vivos y otros reducidos a esqueletos carbonizados que se desmenuzan con la mínima brisa.

Dany conduce a Drogon, dolorido pero vivito y coleando, hasta la orilla de un río para extraerle el arpón. Deberían retirarle la custodia de sus hijos.

Jaime ve que este es un buen momento para convertir a la reina Targaryen en un pincho moruno y, lanza en ristre, carga con su caballo hacia ella mientras Tyrion lo observa todo desde una loma a lo lejos, suplicando que al menos su hermano tenga dos dedos de frente y no ataque directamente a un dragón que acaba de calcinar a la mitad de sus tropas sin despeinarse. La reflexión es inútil. A estas alturas es evidente que aquí nadie actúa con un ápice de sensatez o sentido común. Eso sí, la pirotecnia es alucinante.

-¡Tú no mami!

Al ver que el Matarreyes se acerca con aviesas intenciones, Drogon mira a cámara, guiña un ojo al espectador y escupe una llamarada de 8d6 de daño contra su atacante, que se salva a duras penas gracias a la oportuna intervención de Bronn, que lo derriba del caballo, arrojándose junto a él al río justo a tiempo de evitar que ambos se conviertan en un churrasco. Sus monturas no corren tanta suerte y se convierten en caballos muy hechos. Descansa en paz, Artax. Descansa en paz, Sombra Gris.

Arrastrado por el peso de su armadura, Jaime se hunde en las oscuras aguas del río por el que a menos de un metro de distancia su caballo chapoteaba con tranquilidad... Que fosa fluvial más inoportuna.

-Pensándolo bien, no ha sido mi idea más brillante...

¿Se salvará Jaime o morirá tras este intenso cliffhanger?

Pues yo digo que vivirá, y el que piense lo contrario es tonto del capirote. La prueba más clara de ello no es la información que se ha filtrado sobre esta temporada (la cual no he leído porque prefiero disfrutar de la serie), sino que estas escenas se rodaron en Barrueco de Arriba, provincia de Cáceres, y el río en el que el Matarreyes se hunde es un afluente del Tajo, que, según he podido consultar, tiene a lo sumo tres o cuatro metros de profundidad. Si Jaime no sale por su propio pie, a lo mejor lo pesca un paisano que lo confunda con un barbo.

Y sin más dilación, me despido confesando que no puedo evitar reírme cada vez que oigo las palabras "botines de guerra".

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