Juego de Tronos: Nadie

Empezaré esta entrada con una advertencia: jamás bebáis agua caliente después de comer kiwi.

Dando ese tema por zanjado, os adelanto que en esta recapitulación haré algunas suposiciones respecto de lo que podría ocurrir en el último episodio de esta temporada. Si preferís no leerlas porque creéis que puedo tener razón y arruinaros la sorpresa, saltaos los últimos párrafos de la parte de Desembarco del Rey.

En cuanto a los que decidáis leer mis elucubraciones, algunos quizá pensaréis que no soy tan listo y que lo que digo lo he leído en algún otro rincón de internet. Pero no es así. En primer lugar, porque no gano nada con ello. Soy un hombre adulto y no pretendo dármelas de enterado escribiendo estas entradas, sino entretenerme y, con suerte, entreteneros también a vosotros, ya que no todos tenemos fácil acceso a sustancias psicotrópicas alteradoras de la conciencia. Y en segundo lugar, porque repaso los episodios muy a fondo y es casi inevitable que ate cabos. No lo hago queriendo, simplemente sucede. Los guionistas competentes procuran hilarlo todo y esto implica que las cosas siempre pasan por un motivo y no hay escenas gratuitas (salvo las de desnudos; pero, ¿qué sería una serie de HBO sin desnudos?). Sabiendo esto, solo hay que tener buena memoria para que los puntos se unan solos.

Y ahora, empecemos sin más dilación a repasar el octavo episodio de esta temporada.

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En el Valle de Arryn

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Lem Lemoncloak, responsable de la masacre de la comunidad amish a la que se unió Sandor Clegane, y su pequeña banda de hombres de la Hermandad sin Estandartes están de risas alrededor de la hoguera (los mayores dando lecciones a los más jóvenes sobre cómo se besa de tornillo con doble tuerca hasta la campanilla), cuando llega el Perro, todo rabia y furia homicida, y empieza a repartir hachazos a diestro y siniestro.

Antes de que nadie pueda decir "¿Es mi intestino delgado eso que se desparrama por el suelo?", cuatro hombres están hechos picadillo, y Lemoncloak y el resto de su banda han salido corriendo como alma que lleva el diablo. No hay superioridad numérica que valga contra el Perro cuando le posee el espíritu de Jason Voorhees.

¡Hoy grandes descuentos en hachazos!

El Perro sigue el rastro de sus pelotas antiestrés humanas y las encuentra a punto de ser colgadas de un árbol por Beric Dondarrion (el tipo que ha resucitado más veces que Krilín), Thoros de Myr (sacerdote rojo y doble yonqui de Jim Henson) y otros cinco hombres de la Hermandad. El único tipo de la banda con nombre propio que está  ausente es Anguy, el arquero. Quizás se ha mudado al bosque de Sherwood, donde hay más bailes y menos ahorcamientos.

"¡Clegane!", exclama Thoros de Myr con el sonido de cinco espadas desenvainándose de fondo. "¿Qué haces aquí?", le pregunta (intercalando, eso sí, una parte de la anatomía masculina que rima con dragones entre el "qué" y el "haces" que yo he omitido porque, si algo destaca a este blog, es el buen gusto).

"!@#$%&", contesta el Perro.

La última vez que Clegane coincidió con Dondarrion le faltaron pocos centímetros para partirlo en dos como si fuera el muñeco de Doblor de los Masters del Universo, así que es comprensible que no se abracen ni se den palmaditas en la espalda para celebrar su reencuentro.

-¿A quién esperabais? ¿A Lady Corazón de Piedra?

Dondarrion explica a Clegane que van a ajusticiar a los hombres por atacar el septo y provocar así un daño irreparable a su buena imagen y reputación.

"Somos como Robin Hood y sus Alegres Compañeros", dice. "Y ellos han manchado el buen nombre de la Hermandad. Vale que no llevamos calzas ajustadas de colores brillantes ni nos duchamos a diario... o semanalmente; pero eso no significa que podamos ir por ahí extorsionando y matando a la gente. ¿Tienes idea de cuánto invertimos en marketing el año pasado?".

El Perro le dice que él perseguía a los hombres por la misma razón y exige que le dejen convertirlos en escabeche para compensar que mataran a su amigo Ray (el septón, no el pianista ciego).

Tras negociar el número de hombres que le corresponden y el método de ejecución (a hachazo limpio, la soga, o Raphael cantando Please Speak to Me of Love en inglés), las partes consiguen ponerse de acuerdo, y el Perro ahorca a dos de ellos. Con el cuerpo de Lemoncloak aún sacudiéndose con los estertores de la muerte, el Perro aprovecha para agenciarse sus botas, que tienen +2 de defensa mientras que las suyas solo tienen +1.

-Pinto, pinto, gorgorito...

Más tarde, mientras comparten un cubo de pollo frito del KFC, Dondarrion invita al Perro a unirse a su club. Supongo que ha notado que ahora es un hombre diferente. La mitad de su cara sigue pareciéndose a la de Freddy Krueger, pero ahora se puede mantener una conversación con él sin que te insulte o descuartice.

"Estamos aquí por una razón", dice Thoros, fiel creyente del Señor de la Luz. "Formamos parte de algo mayor que nosotros".

"¿Una serie de televisión?", pregunta el Perro.

"No, algo mayor".

"¿Un fenómeno mundial que los fans viven con gran entusiasmo?".

"Deja de tocarme las narices".

Thoros de Myr y sus acólitos.

Al Perro no le convence demasiado la idea y echa una meada en el río de cara a la cámara para subrayar su postura sobre el tema en cuestión. Por supuesto, le vemos la longaniza, porque es un elemento que dota de credibilidad a la trama.

"Todavía estás a tiempo de reparar el daño que has hecho, Clegane", le dice Beric. "A los espectadores les chiflan los malos que se redimen".

"¿Incluso Theon Greyjoy?".

"Eeeh... Sí, claro, ¿por qué no?".

El Perro se piensa la oferta.

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En Meereen

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Tyrion Lannister y Varys caminan por las calles de una pacífica y floreciente Meereen. ¿No es sorprendente lo mucho que mejora la calidad de vida de una ciudad en cuanto deja de haber tipos siniestros enmascarados apuñalando a la gente en la calle? Además, la campaña de promoción que están haciendo las sacerdotisas rojas para mantener a Daenerys como favorita en las encuestas también marcha viento en popa.

Al llegar a los alrededores del puerto, Varys se despide de su amigo sin que la gran dinámica de la pareja se haya aprovechado más de dos minutos en toda la temporada. ¿A dónde viajará ahora? A donde haya nuevos aliados que puedan inclinar la balanza a su favor cuando lleguen a Poniente, porque, según parece, tres dragones, sesenta mil dothrakis, ocho mil Inmaculados y un Daario Naharis no son suficientes para conquistar un continente en el que las mayores batallas que hemos visto las han ganado bandos de quinientos desarrapados muertos de hambre.

Mi apuesta es que Varys irá a Dorne, porque nadie le tiene más tirria a los Lannister que los dornienses y porque de alguna forma tendrán que reintroducir a Ellaria y las Serpientes de Arena en la trama, aunque nadie las eche de menos.

-Dicen que en Dorne hay un pescaito frito para chuparse los dedos.

De vuelta a la gran pirámide, el Gnomo bebe vino en compañía de Gusano Gris y Missandei y les invita a contar chistes, que es como pedirle a tu bisabuela que te explique cómo funciona internet.

La escena, como todas las similares que la preceden, da más vergüenza ajena que un programa de No te rías que es peor y hace más evidente que nunca lo desaprovechado que está el talento de Peter Dinklage esta temporada.

El momento de asueto se ve interrumpido por la campana de alarma. Los amos de Astapor, Yunkai y Volantis no están por la labor de respetar el acuerdo al que llegaron con Tyrion en el cuarto episodio y han traído todos sus barcos a las costas de Meereen para sembrar el pánico y la destrucción. ¿Dónde está el kraken cuando más lo necesitas?

Tampoco pinta tan mal. En realidad, la mayoría de barcos son réplicas digitales.

Proyectiles ardientes llueven sobre la ciudad día y noche, y Tyrion admite que metió la pata hasta el fondo al confiar en los amos. Gusano Gris dice que la mejor estrategia a seguir es quedarse quietecitos donde están y esperar que el ejército de los amos sea lo bastante tonto para correr hacia la punta de sus lanzas. El sentido común siempre se pierde antes que la esperanza.

De pronto, se oye un "TROMP" en el techo y todos se ponen en guardia. Por suerte, los amos aún no han empezado a lanzar a sus soldados en catapulta para invadir la pirámide, sino que se trata de Daenerys, que entra por la terraza con la misma cara que una madre que vuelve a casa de vacaciones y se encuentra con que sus hijos han montado una fiesta sin su permiso y han dejado todo manga por hombro.

"¿No se puede ir una ni unos pocos días de viaje sin que arrasen su ciudad?", dice. "Estáis todos castigados. Nada de tele ni internet este fin de semana".

-Decidme que al menos mis figuritas de cristal de Swarovski están de una pieza.

Tyrion intenta concentrar toda su acondroplasia para hacerse un poco más pequeño, pero no lo consigue.

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En Aguasdulces

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Brienne de Tarth y su escudero Podrick llegan a Aguasdulces y ven que hay un asedio.

"Parece un asedio, mi señora", dice Pod, consumado militar.

"Eres un consumado militar, Pod", dice Brienne.

Una patrulla de Lannister les conduce hasta el campamento, y mientras Bronn enseña a Pod algunas lecciones valiosas sobre cómo pelear sucio y le explica por qué todo el mundo quiere golpear al "p*** escudero", Brienne se reúne con Jaime en privado en su tienda. Y "en privado" no es mi forma sutil de decir que se lo montan.

Son como hermanos. De ahí que el mayor sea el que arrea los guantazos.

El Matarreyes está sorprendido de que Sansa haya sobrevivido seis temporadas y felicita a Brienne por haber cumplido el juramento que hizo a Catelyn Stark. Como premio ha ganado... ¡esta magnífica tostadora!

Brienne propone un trato a Jaime: ella hablará con el Pez Negro e intentará convencerle de que su ejército la acompañe para apoyar a Sansa en la batalla contra Ramsay Bolton, y él les dejará marchar mientras silban el tema principal de El puente sobre el río Kwai, tomando a cambio el castillo sin una sola baja.

Jaime acepta y le da hasta el ocaso para cumplir su parte. ¿A cuento de qué la urgencia? ¿Por qué no un par de días? ¿Cuándo ha empezado a correr prisa un asedio que podría prolongarse incluso un par de años? Ah, sí, que así es más emocionante. Qué tonto soy.

Antes de abandonar la tienda, Brienne se quita Guardajuramentos del cinto para devolvérsela a su propietario original.

"Nah, podéis quedárosla", le dice Jaime. "Os queda mejor a vos". Es un detalle tan bonito que no sé que hacen que no se tiran al suelo a fornicar como diablos de Tasmania en celo.

Brienne le dice que si fracasa y coinciden en el campo de batalla, ella luchará por Sansa... incluso si eso significa enfrentarse a él en un duelo de espadas con insultos.

"¡Eh! ¡Entonces devuélveme la espada!", piensa Jaime. Pero no llega a decirlo en voz alta, porque sería de mal gusto. En cualquier caso, no sería una mala despedida para el personaje.

-La armadura también os la podéis quedar, Lady Brienne. A mí me quedaría *cof* grande.

Brynden Tully recibe a Brienne en el castillo y, a regañadientes, lee la carta que había escrito Sansa para Edmure.

"Querido tío:

Era una niña mimada la última vez que me visteis. Pero ya no soy ninguna niña. Mi primera regla la vieron más de tres millones de espectadores; y, aunque como tantas cosas en esta serie, esta también ocurrió fuera de cámara, os aseguro que ahora estoy muy familiarizada con términos como B&D, D/s y furry.

Los Bolton (que sorprendentemente no tienen relación alguna con el cantante de baladas románticas) asesinaron a mi hermano y a mi madre, y ahora se pasean a sus anchas por Invernalia. Se toman su sopa y duermen en sus camas, como en aquel cuento infantil cuyo título no recuerdo.

Familia. Honor. Deber. No me queda espacio para desarrollar esos conceptos, pero imaginaos vos el resto del discurso y que sea muy convincente. Llevad a todos vuestros hombres al norte y ayudadme a recuperar mi legítimo hogar y mi póster de One Direction.

Lady Sansa Stark de Invernalia

PD: ¡Ricitos de Oro! ¡Ese era el nombre del cuento!".

Al Pez Negro le emociona que su sobrina se parezca tanto a su madre, pero aun así, se niega en redondo a abandonar su hogar a merced de los Frey y los Lannister. Siente mucho apego por este montón de piedras viejas y mohosas pese a que la humedad no es nada buena para su reúma.

-Zzzzzzz...

Fracasado el plan de Brienne, Jaime hace un último intento por resolver pacíficamente el conflicto y visita al prisionero Edmure Tully para ofrecerle un trato.

Al principio, el señor de la Casa Tully se muestra reacio a negociar con el Matarreyes, ya que él pidió que le trajeran agua del tiempo y se la han traído fría, lo cual sin duda infringe la Convención de Ginebra; pero Jaime esgrime argumentos muy sólidos:

"Vos decís a vuestros hombres que se rindan y abran de par en para las puertas de Aguasdulces, y yo no lanzo a vuestro hijo recién nacido con una catapulta contra los muros, ¿capisci?".

"Hasta el 'capisci' perfectamente".

Poco después, Edmure exige a sus hombres que le abran la puerta, y estos, en contra del buen juicio del Pez Negro, le dejan pasar, que para eso él es su señor y ellos unos manda'os. Una vez dentro, Edmure ordena que rindan el castillo y busquen a su tío antes de que se escaquee como hizo en la Boda Roja.

-¿Puedo usar el comodín de la llamada?

En cuanto ve cómo está el percal, el Pez Negro hace mutis por el foro y acompaña a Brienne y a Pod hasta una barca. Brienne le invita a marcharse con ellos, pero él escoge quedarse y morir fuera de cámara, como los héroes legendarios interpretados por actores demasiado viejos para hacer numeritos con la espada.

Con el castillo tomado y el Pez Negro criando malvas, Jaime contempla el río desde las almenas. Ha cumplido su misión sin derramamiento de sangre y, además, por fin ha tenido una escena decente esta temporada. ¿Qué más puede pedir? Yo ya me conformaba con haberle visto subir unos escalones a caballo.

Pese a que no se ve a dos palmos de uno de lo oscuro que está, Jaime distingue a Brienne y Pod huyendo en barca. ¿Qué hará ahora?, ¿pasará a la página 7 y dará la alarma para que los capturen, o pasará a la página 16 y se despedirá de ella con una ligera inclinación de cabeza?

El Matarreyes elige su propia aventura y, a la vista de que es la alternativa que menos papeleo conlleva, se despide de Brienne sin más. Ella le devuelve el gesto desde el bote, dejando atrás otra temporada de tensión sexual no resuelta.

Imagen oscura número 2.389.

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En Desembarco del Rey

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Qyburn, nigromante tunante, informa a Cersei Lannister de que un grupo de bravucones de la Fe Militante han entrado en la Fortaleza Roja con permiso del rey y están esperándola en el patio. Si la reina madre no tiene nada mejor que hacer que mirar por la ventana, al menos así se distraerá un rato. ¿Os imagináis que alguna vez estuviera haciendo algo cuando entran a verla? ¡Sería la pera!

Lancel Lannister encabeza la comitiva de piadosos matones y, no sin sorna, comunica a Cersei que el Gorrino Supremo desea verla en el Septo de Baelor.

Cersei no quiere exponerse a que vuelvan a raparle el pelo ahora que por fin le ha crecido lo justo para peinárselo, y le dice a su primo que "nanay de la China" y "tararí que te vi", y que se vuelvan por donde han venido.

Los devotos camorristas no aceptan un no por respuesta y dan un paso al frente, meneando sus palos con pinchos de forma vagamente amenazante. Frankengregor también da un paso al frente, interponiéndose entre su reina y el grupo de piñatas humanas de forma contundentemente amenazante.

Un militante con menos sentido común que el resto de sus compañeros y ningún sentido de supervivencia ataca y clava cómicamente su arma en la armadura dorada del gigantesco zombi. Frankengregor pulsa adelante, abajo, adelante y puñetazo alto, y le arranca la cabeza de cuajo.

Las demás visitas deciden que tienen otros asuntos que atender muy lejos de allí y se marchan dejando atrás siluetas de humo.

"¡Volved cuando queráis!", dice Cersei. "Y decidle a su Santísima Inmundicia que aquí siempre será bien recibido. ¡Tenemos pastitas!".

Mountain wins. Flawless victory. Fatality.

Algo más tarde, la reina madre entra en el salón del trono flanqueada, como de costumbre, por Qyburn y Frankengregor, y encuentra el lugar de bote en bote. Según nos cuentan, el rey Tommen va a hacer una proclama real, lo que significa que va a anunciar algo importante. Espero que no sea que van a castrar a Ser Garras.

Cersei está mosqueada porque nadie la había avisado, pero su tío Kevan se pitorrea de ella y ni siquiera la deja acercarse a su hijo, mandándola a una de las galerías laterales del salón, con las figurantes de poca alcurnia cuyos tocados estaban de moda la temporada pasada.

Tommen suelta una chapa que el Gorrino Supremo le ha hecho aprender de pe a pa y anuncia la fecha del juicio de su madre y Loras Tyrell.

"Asimismo, tras mucha ovación y genuflexión, perdón, ovación y reflexión, el Gorr… la Corona, o sea, yo, he decidido que el juicio por combate quede prohibido en los Siete Reinos. Ya sé que aún no se ha inventado la WWE y que es uno de los pocos entretenimientos que tenemos, pero es lo que hay".

Los murmullos y cuchicheos recorren la estancia. Eso significa que a Cersei la juzgaran siete septones y no veremos a Frankengregor espachurrar al tipo que saco la paja más corta. Un drama, la verdad.

Títere sin cuerdas. Patente en trámite.

El joven rey abandona el salón, evitando cruzar la mirada con su madre, no vaya a ser que le arree un guantazo como hacía con Joffrey cuando se pasaba de la raya.

Qyburn se acerca a Cersei y, para alegrarle el día, le dice que sus pajaritos han investigado el viejo rumor del que le habló.

"¿Era solo un rumor o algo más?", pregunta Cersei. "Y, por favor, aunque los dos sabemos perfectamente de qué estamos hablando, sed tan misterioso y enigmático como podáis".

"Más, mucho más", contesta Qyburn, muy misterioso y enigmático.

"Excelente", dice Cersei, juntando los dedos y formando un arco con las manos.

Conspirando 2.0.

¿Qué están maquinando estos dos y por qué se andan con secretitos a su edad? ¿No son ya mayores para andarse con juegos?

Sospecho que la pareja de intrigantes se refiere al fuego valyrio que el Rey Locuelo dejó bajo el Septo de Baelor para celebrar la cremà del siglo. Me sorprendería mucho que no lo fuera, porque las pistas están por todas partes. En primer lugar, vimos fuego valyrio barriendo un pasadizo en la visión que tuvo Bran en el sexto episodio y, como es algo que no aún ha pasado, significa es algo que tiene que pasar. En segundo lugar, en el episodio anterior, Lady Olenna preguntó a Cersei si pensaba matar a todos sus enemigos, lo cual para ella es una idea lago más que tentadora. Y en tercer lugar, Jaime dice expresamente en este episodio que su hermana sería capaz de arrasar ciudades enteras por sus hijos.

Mi conclusión: ¡Flash! ¡Incendio y cremación!

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En Braavos

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Después de bordar su representación de Cersei siguiendo los consejos de Arya, Lady Crane, la actriz a la que nunca he llamado por su nombre con la esperanza de que su papel fuera menos relevante, se dispone a celebrar su reciente éxito tomándose una copita entre bastidores (supongo que no le afectó mucho que intentarán envenenarla hace dos episodios) cuando encuentra a nuestra joven norteña escondida tras unas cortinas, más blanca que el culo de un esquimal y poniéndolo todo perdido de sangre.

-No es más que un arañazo.

La actriz se lleva a Arya a su dormitorio y cura sus heridas. Un poquito de agua oxigenada por aquí, otro poco de mercromina por allá... La mujer tiene experiencia como enfermera, porque solía apuñalar a sus novios cuando tenía ataques de celos y luego se arrepentía y tenía que atenderlos. Clásico Juego de Tronos. La pregunta es a cuántos novios tuvo que agujerear y atender para aprender a tratar lesiones penetrantes en el hígado y el bazo. Voy a suponer que a un montón.

La compañía de teatro se desplazará a Pentos en poco tiempo, y Lady Crane invita a Arya a unirse a ellos.

"Creo que se te daría bien el oficio", dice. "Lo deduzco de lo mal que disimulaste que eres una asesina y tu capacidad para desplomarte medio muerta entre bastidores".

Arya sabe que la Niña Abandonada irá tras ella y es un peligro con patas, así que rechaza la oferta. Además, quiere ver que hay al oeste de Poniente, donde acaban los mapas. ¿Disney World tal vez?

-Por cierto, ¿has leído Misery o visto la película?
-No.
-Mejor.

Horas o días después (es difícil calcularlo cuando el tiempo y el espacio se acomodan a los intereses de los guionistas hasta extremos ridículos), Arya se despierta de sopetón al oír un ruido y se levanta a investigar.

Espantada, la chica encuentra a Lady Crane practicando la tabuyasana, una postura de yoga que se traduce como "mujer muerta incrustada en taburete".

Qué relajante.

A su lado, la Niña Abandonada se parte el ojete.

"¿Has visto Terminator 2?", pregunta a Arya. "Pues imagínate que tú eres John Connor, y yo, el T-1000".

Arya salta por una ventana y comienza a huir sujetándose las tripas para que no se le salgan y resbale con ellas como si fueran una piel de plátano gelatinosa, rosada y especialmente repugnante. La Niña Abandonada corre tras ella, y en los siguientes minutos asistimos a una trepidante persecución por las calles digna de una película de James Bond protagonizada por Roger Moore.

-¿Naranjas?

-¿Has visto El padrino de Francis Ford Coppola?

Lo que la Niña Abandonada no sabe es que, con la tontería de la trepidancia, Arya la ha conducido hasta su pequeña guarida, donde esconde la espada que le regaló Jon.

Arya está muy pocha, pero cuando apaga de un tajo la única vela que les permite ver más allá de sus narices, ya sabemos quién va a ganar esta pelea. A menos que la Niña Abandonada también haya superado el mismo entrenamiento que ella y, por tanto, sepa pelear a ciegas, lo cual no sería descabellado.

¡Fundido en negro!

En la Casa de Negro y Blanco, Jaqen H'ghar, que estaba la mar de entretenido mirando las baldosas, sigue un rastro de sangre hasta la Sala de los Rostros y descubre una nueva y sanguinolenta careta en su colección: la de la Niña Abandonada.

"No he tenido tiempo de limpiarla. Culpa mía", dice Arya a su espalda, apuntándole con Aguja.

Jaqen, que se adapta rápidamente a las circunstancias, le da la bienvenida al club de los Hombres sin Rostro. No caen globos y confeti del techo, pero tampoco son gente muy dada a las celebraciones.

"Finalmente una chica es nadie", le dice. No le da un carné de socio, porque sería irónico.

"Una chica es Arya Stark de Invernalia y está hasta el moño de estas majaderías cultistas y de la sintaxis extravagante", replica ella. "Hala, me vuelvo a casa".

Jaqen le dedica una sonrisa torcida y asiente, porque él sigue molando mucho y lo sabe.

-Quizá debí haberle hablado de nuestros cursos online cuando estuvimos en Harrenhal.

Ocho episodios fuera. Quedan dos.

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